lunes, 30 de junio de 2008

¿EL MINISTERIO DE INDUSTRIA AMPARA A LAS EDITORIALES CATALANAS DEFRAUDADORAS?

Dice el refrán que “quien no llora, no mama”.
Es un refrán que la mayoría de editoriales catalanas se saben muy bien, a pesar de la prohibición de hablar español.
Siempre se están lamentando. Dificultades sin cuento, “tengo que plantearme cerrar la editorial”, etc. Etc., Lamentos con el que engañan al lucero del alba, mientras algunas editoras que yo conozco se dan la vida padre en los paisajes más exóticos del mundo, acompañadas por séquitos un tanto llamativos. Pero tan bien engañan al Ministerio de Industria, que el año pasado recibieron un regalo de 12 millones de euros. Lo malo, es que mirando sus liquidaciones superficialmente, engañan también a abogados y hasta a algunos jueces, a los que mi editora, casada con una especie de Ciudadano Kane de mala muerte, dice tener cogidos en un puño.
Pero esas editoras quejicas y defraudadoras, se jactan de contribuir al PIB español con 1,2%., Con los que no contribuyen es con nosotros, los autores, pues se quedan con nuestro dinero mediante el truco más chapucero que he visto en mi vida. He publicado 16 ediciones de libros en los últimos cuatro años, y estoy viviendo de préstamos y la caridad. ¿La edición española es fuerte o es fuerte la estafa?

domingo, 29 de junio de 2008

¿Los escritores no ganan dinero?

Según una nota de prensa de 2 de julio de 2007, la industria editorial española lanza al día más de un millón de libros y contribuye al PIB español en un 1,2%.
Ante tan halagüeña situación, los escritores españoles estaríamos nadando en la abundancia o, por lo menos, viviríamos decentemente de nuestro trabajo. Con esos datos en la mano, pareciera que aquel lamento de Larra, “escribir en España es llorar”, habría quedado superado, dado que dicen que somos la segunda nación editora del planeta. Pero hay que meditar más.
Yo he publicado millares de artículos en la prensa, he sido guionista de televisión (p.ej., de Pepe Navarro) y he publicado hasta este momento 11 libros. Con una editora en particular, he publicado cuatro libros en los últimos cuatro años, con un total de 15 ó 16 ediciones. Pues bien; esta editora me ha presentado LOS DOS ÚLTIMOS AÑOS liquidaciones por un total de ¡3.400 euros! Tendría que vivir y costear las infraestructuras propias de un escritor con 1.700 euros al año. ¿Es que esta editora pierde dinero con mis libros y los de los demás autores que publica?
Por las apariencias, no sólo no pierde sino que gana mucho, porque realiza tres o cuatro fastuosos viajes al año, a destinos fabulosos, acompañada siempre de un grupo de odaliscas y, casi siempre, de su favorita. Mientras, cuando alguien dice de mí que soy escritor, su interlocutor replica: “Sí, escritor. ¿Pero cómo se gana vida?
Esas editoras con tan buena salud, se quejan tanto que hasta el Ministerio de Industria cae en la trampa, pues regaló el año pasado, en junio, 12 millones de euros a las editoras catalanas. Pero emplean, (parece que mayoritariamente) un truco para defraudar los derechos de autor: Restar de los libros vendidos (que son los derechos realmente generados al autor), los libros que le quedan en existencia, con lo que al escritor no le queda nada que cobrar. Un truco con el que engaña a abogados e, inclusive, a algunos jueces, a los que mi editora afirma tener cogidos por los huevos. Suponía yo que la estafa se cometía con autores de un solo libro o autores que, como yo, no han alcanzado todavía una gran notoriedad pública. Que estarían exentos autores como Delibes o Pérez Reverte. Pero no. Según me cuentan periodistas barceloneses honrados, la defraudación no los deja exentos tampoco a ellos.
Entonces, ¿De qué hablan cuando dicen que tenemos una industria editorial fuerte?. ¿De Alí Babá y lo sopotocientos ladrones?

viernes, 27 de junio de 2008

¿SOMOS IMBÉCILES LOS ESCRITORES?

A juzgar por los numerosos testimonios que recibo estos días de otros escritores, a los que han defraudado como a mí, da la impresión de son muchas las editoriales de Barcelona que creen que los escritores somos imbéciles.
Aunque ya he descrito el fraude varias veces, lo repito en esencia: (aparte de otras siete) tengo cuatro novelas que totalizan unas quince ediciones publicadas con una misma editora; los dos últimos años, esta editora me ha presentado liquidaciones por un total de ¡3.400 euros! El truco de la defraudación es el siguiente: la editora consigna en una columna los libros vendidos (cuyos derechos debe pagarme según la ley), pero pone al lado otra columna con los libros en existencia ¡Y LOS RESTA! De tal modo, totaliza siempre LIQUIDACIONES NEGATIVAS FRAUDULENTAS.
Los escritores somos seres solitarios, necesitados de aislamiento para poder crear y, por lo tanto, no muy amigos del compadreo. Vivimos en permanente inseguridad: “¿Entenderán lo que he querido contar? ¿Comprarán mis libros?” Sabedoras de estos sentimientos, las editoras creen que somos imbéciles y que si no nos pagan nuestros derechos, no vamos a quejarnos (y son demasiados los que no lo hacen).
Según me cuentan los que han decidido escribirme, si no son todas las editoriales catalanas las que defraudan los derechos de autor, al menos son muchísimas.
¿Puede existir así una literatura nacional?

¿Subvenciona el Ministerio de Industria a defraudadoras?

En junio de 2007, el Ministerio de Industria del Gobierno de Su Majestad el Rey de España subvencionó a las editoriales catalanas con 12 millones de euros. Sin embargo, mi editorial catalana me ha defraudado mis derechos de autor de 2007 (y de los últimos cuatro años) y, según el contable de esa editora, “todas hacen lo mismo”.
¿Todas las editoriales de Barcelona se apropian fraudulentamente de los derechos de autor y, sin embargo, el Ministerio de Industria las subvenciona?
Es obvio que tal estafa masiva imposibilita la existencia de una Literatura Española fuerte y con influencia en el mundo, al desposeer a los escritores de su medio de vida obligándoles a trabajar en otra cosa y escribir sólo robando horas al sueño. En mi caso, a pesar de haber vendido ¡15 ediciones! 4 novelas mías, mi editora me ha dejado sin medios de supervivencia hasta abril de 2009, cuando volverá a estafarme. ¿Qué salida tengo, el suicidio?

miércoles, 25 de junio de 2008

EDITORAS CATALANAS DEFRAUDAN TAMBIÉN A PERIODISTAS

Importantes periodistas, también estafados por editoriales catalanas.
Esta mañana, un articulista estrella de un importantísimo periódico digital me cuenta que su editorial catalana le ha aplicado el mismo truco fraudulento que a mí. Pero no es el único: ayer, fueron cuatro los articulistas de grandes periódicos –uno barcelonés- que me han contado historias parecidas.
Según las pruebas, y si algún estamento oficial no viene a desmentirlo, es masiva la estafa de las editoriales catalanas. La ley manda que se pague a los autores el 8 o el 10% del precio de venta de los ejemplares vendidos de sus libros. Cuentas que no exigen ningún otro número. LAS EDITORIALES CATALANAS ESTAFAN PONENDO AL LADO DE LA CIFRA DE EJEMPLARES VENDIDOS UNA COLUMNA HABLANDO DE EJEMPLARES “DEVUELTOS”, con lo que se elimina casi siempre el total a cobrar por el autor y puede ocurrir, como me ha hecho mi editora a mí, que consignen totales en mi contra..
PERO ¿QUIEN DEVUELVE (NI PUEDE DEVOLVER) LOS LIBROS QUE COMPRA? Evidentemente, nadie. Se trata de un truco fraudulento, que consiste en restar como devueltos ejemplares no vendidos todavía, que están en sus almacenes y serán vendidos en el futuro. De este modo, las editoras que se quejan de crisis y obtienen cuantiosas subvenciones del MINISTERIO DE INDUSTRIA pueden permitirse viajes fastuosos, excursiones sexuales y harenes sáficos, mientras los que creamos la literatura nos morimos de hambre.

¿CONSPIRAN CONTRA LA LITERATURA ESPAÑOLA LAS EDITORIALES CATALANAS?

¿Conspiran contra la literatura española las editoriales catalanas?
¿Ha organizado Barcelona, donde se persigue oficialmente el castellano, un complot editorial contra la existencia de la literatura española?
He editado cuatro novelas con la misma editora, totalizando más de 15 ediciones en cuatro años; pero los últimos dos años(antes sólo me pagaba los anticipos), esa editora me ha liquidado un total de 3.400 euros de derecho, desposeyéndome de toda posibilidad de vivir y seguir adelante. Como prueba de lo fraudulento de esas cifras, señalo que todavía este año ha salido la cuarta edición en tapas duras de una de mis novelas, y la tercera edición en rústica, con un sello que presume “best seller”. Tanto la editora como su contable aseguran fraudulentamente que me han pagado lo debido, por lo que he tenido que repasar la ley y consultar a un especialista. El truco de que se vale esta editora para ROBARME es el siguiente: Pone en una columna los libros vendidos (que no se pueden devolver y que es lo que tiene que liquidarme); pero pone a continuación una columna con los volúmenes que el editor no ha colocado Y LOS RESTA DE LOS LIBROS VENDIDOS.
El contable me ha asegurado que “todos hacen lo mismo”. ¿Se refiere a todas las editoriales de Barcelona? Se comprenderá sin ninguna duda que no se puede vivir dos años con 2.300 euros, por lo tanto quince ediciones de libros en tres años no me dan para vivir. Si es verdad que, como dice dicho contable, todas las editoriales de Barcelona defraudan los derechos de autor, ¿no están impidiendo la progresión y la existencia de una literatura española?

martes, 24 de junio de 2008

¿Impiden las editoriales catalanas que haya una literatura española fuerte?

Si dos editoriales de Barcelona me han robado mis derechos de autor el mismo año, ¿hay que suponer que todas las editoriales de Cataluña hacen los mismo?
Durante cuatro años, una editorial que me ha editado 15 veces un total de cuatro libros, ha pretendido “pagarme “los derechos de autor de dos años liquidándome ¡3.400euros! Consultada la ley y un abogado especialista en derechos de autor, resulta que la ley manda que me paguen por los volúmenes vendidos. Pero esta editorial resta a lo que TENGO DERECHO A COBRAR los ejemplares que sus distribuidores no colocan y no una ni dos veces. Ha deducido los mismos libros invendidos hasta cuatro veces, cuando NO PUEDE RESTAR NADA A MIS LIBROS VENDIDOS . El contable de esa editorial me ha dicho que “todos hacen lo mismo”. ¿Se refiere a todas las editoriales de Barcelona?
En la campaña de acoso a la lengua castellana que mantienen los nacionalistas, ¿conspiran las editoriales catalanas para que no podamos vivir los escritores de nuestro trabajo y que, por tanto, no pueda existir la literatura española?

¿Roban los derechos de autor todas las editoriales catalanas?

Me pregunto si todas las editoriales catalanas harán lo mismo que la que me ha estado editando estos cuatro últimos años. Como saben muchos de los que me leen, tengo once libros publicados. He editado cuatro con la antedicha editorial, totalizando más de 15 ediciones en cuatro años; pero los últimos dos años(antes sólo me pagaba los anticipos), me ha liquidado un total de 3.400 euros de derecho, imposibilitándome la vida, como es notorio, y toda posibilidad de seguir adelante. Como prueba de lo descarnado de esas cifras, señalo que todavía este año han salido la cuarta edición en tapas dduras de una de mis novelas, y la tercera edición en rústica, con un sello que presume “best seller”
Dado que tanto la editora como su contable aseguran absurdamente que me han pagado lo debido, me he visto obligado a leerme la ley y consultar a un especialista. El truco de que se vale esta editora para ROBARME es el siguiente: Pone en una columna los libros vendidos (que no se pueden devolver y que es lo que tiene que liquidarme); pero pone a continuación una columna con los volúmenes que el editor no ha colocado Y LOS RESTA DE LOS LIBROS VENDIDOS. Como quien resta peras de un cesto de crezas.
Hay que preguntarse si esta es una práctica común de las editoriales catalanas, o sólo comete el delito esta editora.

¿Roiban los derechos de autor todas las editoriales catalanas?

¿ROBAN LOS DERECHOS DE AUTOR TODAS LAS EDITORIALES CATALANAS?
Me pregunto si todas las editoriales catalanas harán lo mismo que la que me ha estado editando estos cuatro últimos. Como saben muchos de los que me leen, tengo once libros publicados. He editado cuatro con la susodicha editorial, totalizando más de 15 ediciones en cuatro años; pero los últimos dos (antes sólo me pagaba los anticipos), me ha liquidado un total de 3.400 euros de derecho, imposibilitándome la vida, como es notorio, y toda posibilidad de seguir adelante. Como prueba de lo descarnado de esas cifras, señalo que toda vía en este año han salido la cuarta edición en tapas dduras de una de mis novelas, y la tercera edición en rústica, con un sello que presume “best seller”
Dado que tanto la editora como su contable aseguran absurdamente que me han pagado lo debido, me he visto obligado a leerme la ley y consultar a un especialista. El truco de que se vale esta editora para ROBARME es el siguiente: Pone en una columna los libros vendidos (que no se pueden devolver y que es lo que tiene que liquidarme); pero pone a c ontinuación una columna con los volúmenes que el editor no ha colocado Y LOS RESTA DE LOS LIBROS VENDIDOS.
Hay que preguntarse si esto es una práctica común de las editoras catalanas, o sólo comete el delito esta editora.

lunes, 23 de junio de 2008

EDITORIALES CATALANAS ¿pagan derechos a sus autores?

¿Hacen las editoriales de Barcelona igual que ha hecho conmigo mi editora?
Si un escritor firma durante tres o cuatro Ferias del Libro consecutivas y publica cuatro libros en tres años, la gente común cree que vive como un millonario y ha alcanzado la gloria.
Yo soy un escritor que ha gastado toda la vida y ha sacrificado mucho por alcanzar el convencimiento de escribir bien. Fabular imaginativamente y redactar con corrección son metas que un autodidacto como yo debe superar muchos obstáculos para alcanzarlas. Llegado al puerto del conocimiento que da el oficio, uno se convence y decide a entregar a las editoriales lo que ha ido produciendo durante decenios de especulación creativa.
Como ya he dicho, al publicar con cierta frecuencia, para el público uno se ha convertido en un magnate. Nadie sabe. Nadie se imagina por la que estoy pasando ahora.
Cada año, según manda la Ley de Propiedad Intelectual, las editoriales tienen que decirles a sus autores: “Has vendido tantos libros y te corresponde cobrar tanto”. Pero una editorial en Barcelona hace lo siguiente: indica lo que has vendido (que un resultado inamovible, porque nadie devuelve un libro comprado) y te pone al lado ogra columna donde indica los libros de esa edición que el distribuidor no ha vendido (libros que continúan siendo un activo de la editorial) Y RESTA ESOS LIBROS DEL DISTRIBUIDOR de los libros que has vendido INNEGABLEMENTE. Como resultado de la resta, a la editora tahúr y fraudulenta, le sale que no tiene que pagarte nada. Esa editora ha vendido TRECE ediciones de libros míos. Según indicaciones de tres libreros y un distribuidor, me correspondía cobrar este año 38.000 euros. Pero recurriendo al fraude de la mencionada resta truculenta, ESA EDITORA ME HA PRESENTADO UNA CUENTA DE 2.400 EUROS.
Larra decía que “Escribir en España es llorar”. Podría añadir que, además de llorar, ESCRIBIR EN ESPAÑA ES ENRIQUECER A LAS EDITORAS TRABAJANDO EN PLAN ESCLAVISTA.

El estatus de los escritores

Si un escritor firma durante tres o cuatro Ferias del Libro consecutivas y publica cuatro libros en tres años, la gente común cree que vive como un millonario y ha alcanzado la gloria.
Yo soy un escritor que ha gastado toda la vida y ha sacrificado mucho por alcanzar el convencimiento de escribir bien. Fabular imaginativamente y redactar con corrección son metas que un autodidacto como yo debe superar muchos obstáculos para alcanzarlas. Llegado al puerto del conocimiento que da el oficio, uno se convence y decide a entregar a las editoriales lo que ha ido produciendo durante decenios de especulación creadora.
Como ya he dicho, al publicar con cierta frecuencia, para el público uno se ha convertido en un magnate. Nadie sabe. Nadie se imagina por la que estoy pasando ahora.
Cada año, según manda la Ley de Propiedad Intelectual, las editoriales tienen que decirles a sus autores: “Has vendido tantos libros y te corresponde cobrar tanto”. Pero una editorial en Barcelona hace lo siguiente: indica lo que has vendido (que un resultado inamovible, porque nadie devuelve un libro comprado) y te pone al lado otra columna donde indica los libros de esa edición que el distribuidor no ha vendido (libros que continúan siendo un activo de la editorial) Y RESTA FRAUDULENTAMENTE ESOS LIBROS DEL DISTRIBUIDOR de los libros que has vendido INNEGABLEMENTE. Como resultado de la resta, a la editora tahúr y fraudulenta, le sale que no tiene que pagarte nada. Esa editora ha vendido TRECE ediciones de libros míos. Según indicaciones de tres libreros y un distribuidor, me correspondía cobrar este año 38.000 euros. Pero recurriendo al fraude de la mencionada resta truculenta, ESA EDITORA ME HA PRESENTADO UNA CUENTA DE 2.400 EUROS con los que tendría que vivir hasta abrirl de 2009.
Larra decía que “Escribir en España es llorar”. Podría añadir que, además de llorar, ESCRIBIR EN ESPAÑA ES ENRIQUECER A LAS EDITORAS TRABAJANDO EN PLAN ESCLAVISTA.

sábado, 7 de junio de 2008

SEVILLA, CONTRA MÁLAGA

Todo el que tenga memoria y un mínimo de capacidad de observación, sabe que Málaga es ahora mucho menos autónoma que en los años setentas (¡Qué digo menos! El trato de la madrastra a Cenicienta sería amabilísimo comparado con el que nosotros recibimos). La autonomía nos ha hecho a los malagueños menos autónomos y más dependientes de lo que fuimos jamás en 3.000 años de historia. Ni los terribles cartagineses nos sojuzgaron y aplastaron tanto. La autonomía nos ha forzado a ser “pasotas” de nuestro destino, pasotas hasta de nuestros propios hijos, nos forzó a perder la iniciativa y ni podríamos compararnos ahora con nuestros emprendedores abuelos del siglo XIX. La autonomía nos ha forzado a desvirtuar nuestro escudo y ya Málaga no puede ostentar con legitimidad el título de “muy denodada y la primera en el peligro de la libertad”. La autonomía ha logrado que seamos mansos, indiferentes e indolentes. La autonomía comete contra los malagueños toda clase de vejaciones, sin que nuestros “representantes” digan ni mú. Nunca tuvimos, como ahora, una bota permanentemente encima dispuesta a reventarnos.
NO al tercer hospital, NO al Banco de Crédito, No al puerto turístico, No a la capitalidad cultural europea, olvido deliberado del Guadalmedina, anulación de la Carretera de Arco, desmantelamiento institucional de la ciudad, vejaciones a nuestra universidad, indignante trato presupuestario, retrasos intolerables ( y muy sospechosos) de lo que nos “concede”… ¿Qué más necesitamos para entender que la política activa del gobierno sevillano no sólo margina a Málaga, sino que trata de que desaparezcamos? ¿Qué más nos hace falta para comprender que así no podemos avanzar, que jamás podremos hacer nada grande ni nos dejarán intentarlo?
Treinta años de marginación, olvidos, insultos, “errores” pretendidamente involuntarios, desmantelamientos, postergaciones y presupuestos injuriosos son demasiados años de aguante. ¿Qué más necesitamos los malagueños para empezar a tratar de sacudirnos esta injusticia?
El cielo de Málaga está emborregado, ¿quién lo desemborregará?